Leonardo da Vinci era agnóstico, doctrina que niega al entendimiento la capacidad de conocer lo absoluto.
En la España de los albores del siglo XVI el santo oficio cobró un inmenso poder. El primer inquisidor general elegido por los Reyes Católicos a finales del siglo XV fue Fray Tomás de Torquemada prior del convento de Santa cruz de Segovia.
Su obra fue continuada por el arzobispo de Sevilla.
Pero la mayor repercusión como figura religiosa y política la obtuvo el tercer inquisidor general Francisco Jimenez conocido en la historia como General Cisneros, era miembro de la orden Franciscana y protegido del Cardenal Mendoza, fue confesor de Isabel la católica.
A la muerte de la reina los grandes señores de Castilla lo eligieron gobernador del reino, en contra de la candidatura de Fernando de Aragón aunque Cisneros amigo del rey católico se encargó de que obtuviera la regencia. Cisneros conocia la historia de que Fonzalo Fernandez de Cordoba encontró el santo sudario de Cristo, arrebatandoselo a Cesar Borgia.
En la España de los albores del siglo XVI el santo oficio cobró un inmenso poder. El primer inquisidor general elegido por los Reyes Católicos a finales del siglo XV fue Fray Tomás de Torquemada prior del convento de Santa cruz de Segovia.
Su obra fue continuada por el arzobispo de Sevilla.
Pero la mayor repercusión como figura religiosa y política la obtuvo el tercer inquisidor general Francisco Jimenez conocido en la historia como General Cisneros, era miembro de la orden Franciscana y protegido del Cardenal Mendoza, fue confesor de Isabel la católica.
A la muerte de la reina los grandes señores de Castilla lo eligieron gobernador del reino, en contra de la candidatura de Fernando de Aragón aunque Cisneros amigo del rey católico se encargó de que obtuviera la regencia. Cisneros conocia la historia de que Fonzalo Fernandez de Cordoba encontró el santo sudario de Cristo, arrebatandoselo a Cesar Borgia.
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